Las llantas aparecen en un color cobre fluido, lo que proporciona un brillo suave y variado cuando están expuestas a la luz, no tan intenso como un brillo espejo, pero también más brillante que un mate normal. Un efecto de brillo único que hace que las llantas destaquen tanto en movimiento como en reposo. El diseño razonable de los radios y la estructura permite que la llanta distribuya el estrés de manera uniforme, asegurando una alta resistencia y rigidez al soportar el peso del vehículo y diversas fuerzas externas durante la conducción, reduciendo el riesgo de deformación o daño. La personalización de fábrica puede cambiarse a otros colores, como oro, plata, negro, etc. Se pueden seleccionar diferentes tratamientos superficiales, como cepillado, pulido, congelado, etc., para cambiar la textura y el brillo de las llantas.